La capital italiana de Roma es un destino imprescindible, un lugar perfecto para visitar en cualquier época del año y que no defraudará a nadie que se atreva a visitarla. Además, Roma posee un gran número de atracciones con las que los más pequeños de la casa se lo pasarán en grande.

Pasear por Roma es lo más parecido a viajar en el tiempo, y para que este viaje sea aún más realista y los niños, además de divertirse, aprendan, la ciudad nos ofrece la atracción de 3D Rewind, justo al lado del imponente Coliseo. Se trata de un viaje guiado a través de los monumentos más populares de la ciudad y donde podremos conocer a personajes célebres de Roma de todos los tiempos. Se trata de una atracción interactiva, donde los niños podrán conocer de primera mano los monumentos más emblemáticos, emperadores o dioses de la Antigua Roma. A nuestra llegada a la ciudad podremos acceder a un amplio abanico de rutas turísticas con guías especializados. Algunas de las rutas más interesantes y divertidas para realizar con niños son la Ruta del Tesoro, la Ruta de Los Animales de Roma, y la Ruta de Monti-Foros. Uno de los lugares más populares, sobre todo en verano, es All´ombra del Coliseo, lugar, a escasos metros del Palatino, donde podremos disfrutar de un fresco baño en una piscina, degustar la gastronomía italiana más selecta en alguno de sus restaurantes y contemplar alguno de los espectáculos musicales que se celebran aquí a diario. Otro de los puntos turísticos de la capital más atractivos para ir con menores es el Parque Zoológico Bioparco. Se trata de un jardín zoológico con más de cien años de antigüedad en Villa Borghese, lugar donde también podremos visitar el Lago Esculapio, y la Casina di Raffraello. Otros lugares en los que no hay cabida para el aburrimiento en Roma son el Teatrino de Pulcinella, fabuloso teatro tradicional de marionetas, Technotown, lugar dedicado íntegramente al estudio de las nuevas tecnologías y que se halla en la preciosa Villa de Torlonia, y por último, el Planetario de Roma, donde destaca su cúpula de casi quince metros de longitud.

Viajar a Roma hoy en día puede ser muy económico gracias al auge de las compañías aéreas de bajo coste, con las que podremos conseguir vuelos, ida y vuelta, inferiores a los cincuenta euros siempre y cuando realicemos la reserva con suficiente tiempo de antelación. Además, Roma posee una gran oferta de alojamientos, para todos los gustos y bolsillos: hoteles de todas las categorías, hostales juveniles, albergues y pensiones.