En la isla de Tenerife, se encuentra el parque natural de mayor extensión de las Islas Canarias, el Parque Natural de la Corona Forestal, de gran belleza e importancia natural, ya que la mayoría de las especies vegetales que crecen en sus laderas son endémicas de las Islas Canarias.

La Corona Forestal posee una gran variedad geomorfológica, un terreno repleto de valles, barrancos de gran pendiente y tubos volcánicos. Además de disfrutar de la variedad biológica del parque natural, en él se realizan actividades muy divertidas como excursiones en caballo o camello, deportes al aire libre y otras de carácter didáctico-ambiental, actividades que nos mantendrán activos durante toda nuestra estancia. Además, es un sitio predilecto para los escaladores y amantes del deporte extremo, por sus enormes paredes y barrancos. Un lugar muy especial en una isla que también lo es, una gran opción para practicar turismo rural, tanto en familia como con amigos o en pareja. En cuanto a la riqueza vegetal del parque, destaca por el hecho de que aquí se encuentra el pinar mejor conservado de todo Tenerife, siendo el pino canario la especie más extendida. Además, también contemplaremos laurisilva y especies vegetales muy amenazadas y que solo crecen cerca del Teide como el saúco. En cuanto a la fauna de la zona, algunas de las especies más representativas son el pinzón azul y los murciélagos, muy variados, siendo el murciélago orejudo canario el más extraño de ellos.

Los vuelos hasta Tenerife son muy asequibles gracias a las ofertas de aerolíneas de bajo coste como Easyjet o Ryanair, ya que reservando con tiempo podremos conseguir vuelos, ida y vuelta, inferiores a los cien euros. En cuanto al alojamiento, dentro del espacio natural no hay pero sí cerca. Aunque una buena opción es hacer noche en Tenerife, por su amplia oferta de alojamientos y corta distancia del parque, menos de cincuenta kilómetros.