A menos de media hora de la asombrosa ciudad de París se encuentra Versalles, conocida también como el Palacio del Rey Sol. Versalles es de esas ciudades que obliga a todo el que la descubre a volver a visitarla, ya que deslumbra con su enorme patrimonio, belleza y sus calles llenas de Historia.

Versalles guarda tesoros de gran importancia que ofrece a todos aquellos entusiastas del Arte y la Historia que la eligen como destino. Museos, jardines, palacios, bosques e iglesias configuran un patrimonio envidiable. Algunas de las visitas que no nos podemos perder son el Palacio del Petit Trianon, el Museo de las Carrozas, ubicado en las Cuadras del Rey, el Huerto del Rey, y el Gran Trianon. Entre los barrios más populares de Versalles se encuentran Notre-Dame y Montreuil, repletas de tiendas y mercados pintorescos, así como de restaurantes, bares, y locales donde degustar la afamada cocina francesa. Esta ciudad francesa, también destaca por sus espacios verdes, jardines y fuentes de gran belleza que invitan al relax y a pasear. Otras visitas interesantes serían al Museo Lambinet, que se centra en el Siglo de las Luces, y el Palacete de los Menus Plaisirs. Además, durante nuestra visita podremos disfrutar de los denominados Jardines Musicales, pequeños conciertos que se celebran, sobre todo en primavera y verano, en los jardines próximos al Palacio de Versalles. Otro de los atractivos del lugar son los numerosos espectáculos pirotécnicos que se desarrollan a lo largo de todo el año.

Los vuelos hasta París son muy asequibles hoy en día gracias a las ofertas de vuelos baratos de compañías aéreas de bajo coste como Ryanair o Vueling. Además, el traslado en tren de París a Versalles es también muy económico, ya que hay trenes a diario cuyo recorrido dura poco más de quince minutos. En cuanto al alojamiento, lo mejor es hacer noche en la capital francesa ya que cuenta con una amplia oferta de hoteles, hostales y albergues de todo tipo, aunque Versalles también cuenta con varios hoteles y hostales muy atractivos.