Casi el 50% de los turistas que disfrutan este año de sus vacaciones en España son nacionales. La crisis no ha impedido que la mayoría de los españoles que otros años han gozado de vacaciones no se puedan ir este verano, ya que lo consideran algo básico, un derecho imprescindible y una recompensa obligatoria tras un año de trabajo.

Pero sin duda, casi todos hemos tenido que apretarnos el cinturón y buscar destinos más económicos, ofertas y promociones con las que podamos ahorrar algo de dinero, y otras posibilidades que nos hagan más llevadera unas vacaciones durante la crisis.

La Mesa del Turismo lanzó unas previsiones bastante optimistas, ya que advierten que el turismo en Agosto de este año será similar al del año pasado, aunque especialmente los españoles tendremos que mirar bien cada gasto y recortar presupuesto por lo general. Y claro está, los turistas extranjeros que vengan a España a pasar sus vacaciones también disminuirán sus gastos, según las previsiones, aunque menos que nosotros, ya que debemos recordar que las playas del país suelen acoger a extranjeros con cierto poder económico casi por tradición.

Una tendencia que se ha hecho notar en la última década y que este año comparte liderazgo con la costa es el turismo rural, que acoge la mitad del turismo nacional frente a las playas de la península y de las islas. Sólo un 15 % aproximadamente del turismo nacional se focaliza en la cornisa cantábrica y en la costa atlántica.

En una evaluación superficial se puede observar que son las empresas relacionadas con el turismo las que están sufriendo de forma más severa la crisis, ya que aunque se mantienen las cifras de personas que gozan de unas vacaciones, la alta competencia ha desembocado en una deflación preocupante para ellos y que los deja con un margen de ganancias muy escaso, incluso a veces nulo, tirando los precios por los suelos para por lo menos cubrir gastos.