Klagenfurt es uno de los grandes centros turísticos de Austria junto a la capital, Viena. Una ciudad digna de admirar y pasear por ella, repleta de historia, museos y espacios verdes, además de una agenda cultural, vida nocturna y gastronomía excelentes para un viaje repleto de sensaciones.

Hay muchas cosas que ver y hacer en Klagenfurt pero, sobre todo, se trata de una ciudad hecha para sentir, para vivir experiencias inolvidables. Entre las vistas más interesantes de la ciudad y monumentos que no nos podemos perder se encuentra el Stadttheater Klagenfurt, el teatro y símbolo de la ciudad, los parques de Koshatpark y Schubertpark, y los palacios cercanos a las aguas del Río Wörthersee. Algunos  de los más importantes son el Palacio Welzenegg y el Maria-Loretto, entre otros de variados estilos y colosales proporciones. En el casco antiguo podremos contemplar joyas de la arquitectura como la Catedral de Klagenfurt, la Iglesia de Satdtpfarrkirche, una de las más antiguas del país, y podremos pasear a lo largo de un canal que divide la ciudad en dos, el Lendkanal. Por último, hay que destacar el amplio catálogo de museos que ofrece esta ciudad, siendo algunos de los más populares el Museo de Carintia, el Museo de Arte Moderno, y el Museo de la Minería, donde podremos disfrutar también del Jardín Botánico, situado justo al lado.
Klagenfurt posee un aeropuerto propio, conocido como el Aeropuerto del Adriático. Sin embargo, sale mucho más económico volar hasta Viena y proseguir nuestro viaje en autobús. Podemos conseguir vuelos baratos a la capital austriaca, siempre y cuando reservemos con tiempo y con aerolíneas de bajo coste. Klagenfurt cuenta con una amplia oferta en alojamiento, desde hoteles hasta hostales juveniles y pensiones económicas. Un destino estupendo para conocer el centro de Europa a precios baratos.