El Muro de Berlín, conocido también por muchos como el «Muro de la Vergüenza», es una pared de hormigón que dividió la capital de Alemania durante décadas y del cual quedan tramos que nos recuerdan la historia de Berlín. Además de los tramos del muro, en torno a él podremos visitar museos y monumentos muy interesantes.

El Muro de Berlín guarda muchos detalles y secretos, historias protagonizadas por comunistas, lucha de ideologías y huidas clandestinas de habitantes de la RDA. No separó únicamente a los habitantes de Berlín, sino también sus ideales. El mayor tramo que aún se conserva del muro se halla en Mühlenstrasse, con más de un kilómetro de longitud. Representa una interesante opción para viajar a Berlín y conocer su historia más reciente. Algunos de los rincones más emblemáticos que guardan relación con el histórico muro alemán son la Puerta de Brandeburgo, símbolo indiscutible de la reunificación de Alemania y que se halla en  el bulevar Unter den Linden, el Checkpoint Charlie, en Friedrichstrasse y el puesto de control más importante entre Berlín Occidental y Berlín Oriental. También hay que mencionar el Palacio de las Lágrimas en Friedrichstrasse, estación en la que los afortunados que podían trabajar en Berlín Oeste debían dejar atrás toda su vida. Otras atracciones imprescindibles acerca del Muro del Berlín son el Museo del Muro y el East Side Gallery.

El Museo del Muro, el Mauermuseum, se presenta como una de las paradas obligadas para cualquier amante de la historia puesto que en este museo podremos acceder a una exposición completa de la historia del muro y podremos experimentar como se vivía en aquella época gracias a las realistas recreaciones del museo. Por otro lado nos encontramos con el East Side Gallery, una galería de arte de más de un kilómetro de largo. Se trata de un conjunto de murales realizados en el lado Este del muro, en el Distrito de Kreuzberg, desde el mismo momento de la caída del muro  en el año 1989.