El pequeño pueblo aragonés de Alhama de Aragón es un destino perfecto para un viaje barato al norte de España. Alhama de Aragón se halla en un enclave natural privilegiado de la región de Aragón. Constituye un lugar para disfrutar del silencio, de la tranquilidad y de tradiciones centenarias.

Situado justo en la ribera del Río Jalón, la localidad de Alhama de Aragón es, además de un gran destino rural, una de las mejores opciones para realizar también turismo termal, puesto que cuenta con varios balnearios y es famoso por sus numerosas fuentes de aguas beneficiosas. Estas fuentes ya eran usadas durante la Época Romana y también por los árabes, debido a las propiedades curativas de sus aguas. Muchos de los tratamientos y técnicas a las que podremos acceder con el fin de tratar afecciones, que van desde las respiratorias hasta las dermatológicas, se basan en estos principios curativos. Alhama de Aragón posee también monumentos y edificios de gran importancia y con mucho encanto. Algunos de los rincones y lugares más destacados de la localidad aragonesa son la Iglesia de la Natividad, de estilo barroco, el Castillo, que aunque esté en ruinas conserva perfectamente la torre del homenaje, y el Monasterio de Piedra de Nuévalos. En su entorno se pueden realizar numerosas actividades y deportes. Son muchas las rutas de senderismo que podremos realizar, también podemos pescar truchas en el Río Jalón, montar a caballo o dar paseos en bicicleta por sus bellos parajes. El pueblo cuenta también con varios restaurantes donde comer platos típicos de la zona y talleres de alfarería que siguen conservando la cerámica típica desde hace siglos.

Sin lugar a dudas, una gran elección para pasar unos días en absoluta tranquilidad y olvidarnos de nuestros problemas cotidianos, un remanso de paz donde disfrutaremos al máximo de nuestras merecidas vacaciones.