Gales posee algunos de los paisajes más hermosos de Gran Bretaña y una oferta turística muy variada. Con más de 1.500 kilómetros de costa, lagunas en el centro, tres Parques Nacionales (Brecon Beacons, Pembrokeshire Coast y Snowdonia) , las montañas al norte y la espectacular ciudad de Cardiff, son muchas las cosas que hacer y ver durante nuestro viaje a Gales.

Gales es una tierra mitológica, de castillos y dragones, siendo el dragón rojo su símbolo; historias cuyas huellas se perciben en numerosos rincones. Gales está hecha tanto para los amantes de la naturaleza y el aire más puro, como para los que prefieren un trismo más urbano y el ajetreo de la ciudad. Son muchos los valles y lagos importantes, siendo los más representativos los lagos Bala, Llyn Ogwen, Flynnon Llugwy, y los valles de Afan, Amman y Neath. También sería interesante visitar alguno de los numerosos cromleechs construidos durante la Prehistoria, como los de Pentre Ifan o Bryn Celli Ddu. Ya en Cardiff, la ciudad más importante en Gales, son muchos los monumentos dignos de admirar. El Castillo normando de Cardiff es el edificio más famoso, en pleno corazón de la ciudad. Otros lugares de gran interés histórico y artístico son las catedrales de Wrexham y Metropolitana, de gran belleza y majestuosidad.

Para llegar en avión, podemos elegir entre el Aeropuerto Internacional de Cardiff o viajar hasta Londres y tomar después el tren, siendo la segunda alternativa la más económica dados los precios baratos que ofertan muchas compañías aéreas de low cost hasta la capital inglesa. En cuanto al alojamiento, para ahorrar lo más aconsejable es dormir en un hostal juvenil o albergue, cuyos precios se encuentran entre los 15 y los 25 euros aproximadamente. Algunos hostales con muy buena relación precio-calidad son Nomad Hostel, NosDa Studio Hostel y Bunkhouse Hostel.